Los racores son componentes esenciales en sistemas de tuberías, utilizados para conectar secciones de tuberías o mangueras, facilitando la transferencia de líquidos o gases. Estos elementos se encuentran en diversas industrias, como la automotriz, la hidráulica, la neumática y la manufactura.
Existen varios tipos de racores. Cada tipo se adapta a diferentes aplicaciones y materiales de tubería, como metal, plástico o goma. Estos aseguran conexiones firmes y estancas, previniendo fugas y garantizando la integridad del sistema.
La elección adecuada depende de factores como la presión del sistema, el tipo de fluido y las condiciones ambientales. Un racor bien seleccionado y correctamente instalado optimiza el rendimiento y la seguridad del sistema, minimizando el mantenimiento y el tiempo de inactividad. En resumen, los racores son componentes clave para la eficiencia y fiabilidad en sistemas de transporte de fluidos.
